domingo, 3 de febrero de 2013

UN RETO SECRETO (escrito)


 

Empieza una batalla. Estáis tú y ella. Parece que las fuerzas están igualadas pero es sólo el principio y quizás, utiliza esta táctica sencilla para que te confíes.

 

El primer asalto acabó y va ganando ella. ¿Qué me ha pasado? Te preguntas como si hubieras estado ausente en la acometida.

 

Se acabó el descanso y antes de que puedas coger aire, vuelva a sonar la campanilla anunciando el fin del segundo asalto. ¡No puede ser! Te dices cuando no has visto que ya han pasado casi más de dos horas desde que empezasteis esta guerra de fuerzas desnivelada por momentos.

 

¡Ella va ganando y lo sabe! Te mira desde un extremo con soberbia, esa soberbia digna que tienen todos los campeones horas antes de dar por finalizada la vida de su contrincante. Tiene tiempo y lo sabe. Quiere desgastarte. Desea que te rindas. Ni contempla la posibilidad de que le asestes un buen golpe directo. ¡No te cree capaz de ello!

 

Ahora vuelves a verte con fuerzas cuando en el tercer asalto alguien te susurró algo al oído antes de salir a la palestra. Ese alguien desconocido, sin cuerpo, ni forma, ni olor, ni tamaño,… esa neblina trasparente que se metió en tu cerebro con un rumor y que no deja de dibujar tu victoria en tu mente.

 

Ella no se ha dado cuenta de que has tenido ayuda y sigue mirándote cada vez con la altanería fuerte del vencedor. Pero sacas tus armas y se convierte todo en un baño de sangre. Tu pluma no le dio tregua y su sangre negra mana a raudales por todo su cuerpo. Yace envuelta en tus palabras que van acabando una tras otra, con todo su desdén dejándola completamente a tu merced.

 

No te pide clemencia. No te pide que acabes con su vida. ¡Ella sabe muy bien el papel que ocupará ya en tu vida! Una esclava sumisa, una aprendiz obediente, una niña sin caprichos a indulgencia de su maestro.

 

Cuando el mentor gana ella,… no puede hacer nada. Pudo enfrentarse una vez y probar su fuerza. Dos,… no lo hará jamás. Es como luchar contra corriente y eso no es lo que le enseñaron a ser.

 

La hoja en blanco muere para dejar paso a la obra, mejor o peor, pero siempre diestra que el autor tenga a bien mostrarnos. Muchas veces, mas de las que me gustaría reconocer, ha ganado ella la batalla. Pero cuando las musas, esas voces susurrantes que se camuflan en las sombras de las sombras, están de tu lado dando fuerza a tu creatividad, a tu pasión, a tus ganas,… la batalla siempre será ganada contigo. Y no es que unas tenga celos de las otras,… ¡Eso no suele pasar en el arte de la prosa! Sólo que no todos merecen el don de ser aconsejados y no todos los que son aconsejados merecen ese don.

 

Afortunado el que gane la batalla y afortunado el que la pierda. El que la gana estará para siempre unido a un poderoso amante que es difícil de complacer cuando la inspiración no llega. El que pierda estará a merced de cualquier amante,… pero jamás del más caprichoso y delicioso que pueda llegar a imaginar.

 

Escribir es una tortura y un arte. El látigo anda siempre muy cerca de la pluma tintada. No por eso el dolor es amargo porque sólo cuando no hay tormento,… es cuando mas agrio es lo que se escribe. Sólo con lágrimas en el alma se compensa la muerte de una página en blanco más. Si la muerte es en vano,… ni vale lo escrito ni el escritor que lo suscribe.

 

¡Así es el arte del dominio del verbo!

sábado, 2 de febrero de 2013

CASTIGO, SANCIÓN, PENA


¿Qué es el castigo? Según nuestros amigos de Wiki el castigo es una sanción o pena impuesta a una persona, animal o ser vivo (aunque el término se utiliza para las personas en general) que esta causando continuas molestias o padecimientos, causa por la que se ejecuta una acción, que puede ser tanto física como verbal, directa o indirecta, contra quien ha cometido una falta o delito.

El castigo se aplica según se incumplan las normas o conductas morales establecidas (desde un nivel de la sociedad en general, hasta el ámbito intrafamiliar, incluyendo el "auto-castigo")

Según el rango de severidad, existen castigos que pueden causar dolor físico o moral a una persona, e incluso llegar a la mortificación al corregir duramente, o todo lo contrario.

 

Hay muchas formas de castigar o de “auto-castigarse” pero voy a mostrar, algunas muy crueles, no por el morbo de hacer daño sino por la forma que tiene las personas de hacernos daño:

 

-         Exilio: El exilio es uno de las infames condenas. Verse privado de vivir en su tierra por ideales políticos diferentes, por situaciones que se vuelven complicadas hasta el punto de tener que irse a otro país para no morir, es uno de los peores castigos imaginables que puede recibir una persona en su vida.

 

-         Culpabilidad: Es la pena del que obró por un bien mejor de una persona a la que quería o amaba, y esta, al hacer realidad su petición (una intervención, una cura oportuna, un puesto laboral aceptado, un servicio contratado,…) perece durante o después del mismo. La culpabilidad es un auto-castigo desgarrador. La pena se mete desde el principio y va erosionado lentamente a la persona hasta dejarla sin ganas de vivir. La pérdida, que va siempre previa a la culpabilidad, es un gran vacío inmenso, un agujero negro que va succionando hasta la mísera esperanza circunstancial. Pero la vida es simple y quien está destinado, por una cosa o por otra, a cumplir un deseo querido o no por el bien de la persona querida, es sólo un ser humano no el ejecutor del mal (si hay que llamarlo así). Hay que hacer las cosas con todas las consecuencias imaginables. Cuesta asumir la culpa pero sólo debemos asociarnos la que nos pertoca no las que nos auto-lesione hasta hacernos desventurados de por vida. La muerte dice que es la que traerá la paz del culpable henchido de culpabilidad pero,… es mejor no llegar al final para perdonarnos a nosotros mismos.

 

-         Automutilación: Es una forma de herirse (normalmente con un cuchillo o una cuchilla, haciendo una herida en la piel una y otra vez), de infligir en el cuerpo daños para aliviar un dolor (hay personas que piensas que el hecho de tatuarse o de hacerse piercings, es una forma de automutilación) interno por incomprensión, por rabia, por tristeza, por falta de una carencia interna que no es satisfecha,… Es un grito de ayuda reflejado en una herida que raras veces, recibe la atención requerida en silencio.

 

-         CADI (comportamiento autodestructivo): Se suele considerar un suicidio lento inconsciente de la persona. El individuo no se suele reconocer es forma de autodestrucción (lo niega y muchas veces, no se es consciente de ello). El CADI es difícil de observar en una sola conducta. Cada individuo lo expresa de una manera distinta y por eso es tan complicado de medir. Es el cúmulo de éstas y su tendencia a la repetición, lo que lo convierte en un factor importante de riesgo para el individuo que puede llevarlo a la muerte.

 

Nosotros, o el ser humano en general, asumimos el castigo normalmente con un acto previo que ha infligido las normas, las leyes, las directrices marcadas por una sociedad y necesita ser sancionado para demostrar a la sociedad que todos recibimos el mismo trato. ¿Pero que pasa cuando esto no es así? Simplemente que se pierde la FE en el sistema y sin rumbo, sin directrices que marquen nuestro camino correcto,… la anarquía o revolución social parece ser el único camino para conseguir lo que se nos está negando. ¿Hay que llegar tan lejos para arreglar lo que está mal o lo que no ha sido sancionado? Yo creo que la solución es fácil: sólo restaurando la confianza en el individuo se consigue volver al principio y es tan fácil como que lo que ha sido, vuelva a ser. Si alguien, sea quien fuere, comete un delito grave digno de ser castigado de inmediato (no se pide que sea ejecutado, ni quemado, ni atormentado de por vida,… sólo se pide justicia y retornar todo aquello que fue malgastado o usado inadecuadamente para fines de autobombo y platillo), no debe de eternizarse por defecto de forma ni por algo llamado JUSTICIA. Es tan fácil como privar a esa persona de todo lo que se le acusa, inhabilitar sus funciones y hacerle ver lo que es vivir con sólo cuatrocientos euros escasos al mes. ¡No hay castigos duros sino jueces demasiado blandos! Y el que no es blando o que actúa por lo que le parece justo, es CASTIGADO por mostrar al mundo la verdad.

 

MORALEJA: La vida no es justa pero si hubiera algo más de justicia en la vida,… esta sería más fácil de vivir. No se pide mucho, sólo lo que parece justo a los ojos de todos. ¿Es pedir mucho? NO,… es pedir ser recompensados por una vez por ser personas justas.

CARTA 29.12.2012 (Nunca es tarde si la dicha es buena)

 

Querido Febo,

 

¿Qué tal? ¿Cómo va todo? ¿Cómo fue la navidad? ¿Cómo vas a celebrar el fin de año? Yo estoy bien. La navidad (mejor dicho la nochebuena), con la familia materna y muy bien viendo como mi sobrino mayor (6 añitos) hacía cagar al Tió. Sant Esteve con al familia de mi pareja y con mi sobrino pequeño (3 añitos) disfrutando revolcados en el suelo él y yo (son una dulzura de niños mis sobrino y sobretodo para su tita que pierde hasta la compostura en casa hasta de los suegros por pasar un rato increíblemente genial con sus niños). El fin de año nada especial: mi pareja y yo solos en casa porque así me gusta (lo hacemos desde hace 3 años y para mi ya es como una tradición que no me toquen la moral ni el 31 de diciembre ni el 1 de enero. ¡Llámame rara! Jajajaja).

 

Hay Febo, que todo lo del principio era hacer tiempo que si te escribo, y no es ninguna inocentada pese a que lo hicimos ayer 28 de diciembre, es porque ayer monté un TUPPERSEX en mi casa con unas amigas (íbamos a ser 12 pero al final sólo fuimos cuatro pero genial). ¡En serio! A tomar por saco lo de quedar para comernos unos nuggets. El día que tu y yo quedemos, con tu permiso, nos vamos los dos a un sex shop a informarnos y ver quien pone mas caliente a su pareja al llegar a casa, jajajajajajaja (bueno, los nuggets también que si se me baja el azúcar de la impresión, no vas a tener cojones (hosti, que grosero me ha quedado esto, jajajaja) de levantarme del suelo, jajajajajaja).

 

¿Por dónde empiezo a explicarte? ¡Ni lo sé amigo! Ayer fue tanta información y tan poco tiempo para aprender y escribir que seguro que hasta contándotelo, me atropello yo sola. Bueno, empiezo por el principio que seguro que querrás saber que compré yo para mi: bolas chinas, lubricante para las bolas chinas y un masajeador capilar (nene, que cosa tan simple y que gustito da. Dicen que es antistress pero los cojones… a mi me puso supercachonda, jajajajajajajaja).

 

¿Con qué me quedé con ganas de comparar? Amarrate los machos porque vas a flipar. Empiezo:

 

- Kit de incienso de feromonas, vela y aceites corporales efecto calor: Bueno,… esto ya lo comenté contigo lo de la vela y ya lo probaste con tu pareja y los aceites corporales, mejores que los del sitio donde vas en Sabadell a hacerte masajes, seguro que no son pero lo guay de este kit es que el incienso de feromona hace que tanto tu como ella os pongáis lo mas salvaje (en lo referente a animales racionales que somos) porque saca los instintos mas primarios (o eso es lo que dicen que tampoco lo pude adquirir y recomendártelo de primera mano… ¡Ya me hubiera gustado ya! Jajajajajajajajaja).

 

- Guantes de satén rojo con tanga a juego: Mira, no sé que me pasa pero es que para mi los guantes son supersensuales y excitantes. Seguro que a los hombres cuanto mas piel veías, mejor, pero a mi es que me encantan y me hacen sentir SUPERSEXY e incluso,… mas receptiva. ¡¡¡Llámame tonta!!! Jajajajajaja.

 

- Vibrador punto G de 10 velocidades: Jo,… esto si que me jodio (valga el doble sentido, jajajaja) no poder comprarlo. No por lo de las diez velocidades que tienes su morbo probarlo sola o con pareja, sino porque era verde con purpurina y,… me dejó con las ganas con sólo verlo. ¿Cómo puede ser que te pueda “enamorar” un vibrador a primera vista? Jajajajajajajaja. ¡¡¡ES QUE SOY RARA HASTA PARA ESO!!! Jajajajajajajajajajaja.

 

- Anillo vibrador estrangulador: Mira que el asunto de estrangular un pene para que esté más tiempo erecto no me pone pero es que sólo pensar que se podía poner por detrás del escroto y flipar haciendo el amor con eso puesto tanto el hombre como la mujer,… me puso muy excitada. ¡Vaya tela! Jajajajaja.

 

- Sales de baño: Me encantan las sales de baño pero si encima son afrodisíacas es que me da la tentación de coger la guía de hoteles de Barcelona, buscar uno con un gran jacuzzi y hacer sexo acuático hasta quedarme sin sentido. ¡¡¡Me encanta el agua!!! ¡¡¡Me encantaría probarlo!!!

 

- Patito vibrador: ¡¡¡QUE PECHA DE REIR CON EL PATITO VIBRADOR!!! Jajajajajajajaja. Es un patito de goma, que por estar en estas fechas navideñas, viene con traje de papa Noel y sirve para metértelo entre las piernas y jugar contigo misma en el agua (el agua y yo tenemos un problema ya que con lluvia, con ducha, con bañera,… me excita estar mojada de agua). No es para introducir dentro sino de vibración externa pero,… anda que no me reí con la coña del puñetero patito de agua (color amarillo como está mandado, jajajajaja).

 

- Lubricante de silicona: ¡Que invento nene! Joer,… mira que yo creía que la Durex hacía el mejor y mira que no me gustaba porque era frío y a mi me vas más lo de efecto calor, pero, el lubricante de silicona, sólo probarlo en la mano, ya me hizo sentir sensaciones nuevas. ¡Lástima de la pelas! Sino hubiera caído fijo porque también era efecto calor. ¡Puta crisis! Me jode hasta en la cama, jajajajajajajajajaja.

 

- Huevo vibrador con mando a distancia: ¡¡¡NENE!!! Lo vas a flipar cuando te lo cuente. Es como un huevo Kinder con vibración y cordoncito como las bolas chinas. Se mete en la vagina y tiene mando a distancia que tiene una autonomía hasta de 10 metros. Si te parece que eso impresiona, y como éramos cuatro féminas mas la chica que vino cinco, se ve que si compramos las cuatro el mismo un mismo mando sirve para ponernos cachondas a las cuatro. Me explico, que si una quiere pasar un buen rato con sus amigas, le hace que se pongan el huevo diciendo que ella va a llevar el mando, y se pasa haciéndolas sufrir de lo lindo en mitad de un centro comercial mientras no pueden correr tras de ella de lo cachondas que las pone la vibración, jajajajajajaja. Bueno, hablando muy en serio, es algo que compraré en breve pero más por el morbo de darle a alguien el mando de tu placer. ¡Pufff! Sólo pensarlo se revoluciona todo mi cuerpo.

 

- Aceites efecto calor de frambuesa y mora: Mmmmmm,… fue un pecado no comprarlo pero,… que le vamos a hacer.

 

- Crema clitomax o algo así: Se pone por los labios exteriores de la mujer y por el clítoris. Es un vasodilatador que previo al calentamiento, consigue unos orgasmos bestiales por parte del que lo lleve puesto. Esta crema dice que también la pueden utilizar los hombres pero sin ponerla en el glande (el pene sin tocar el glande, el escroto, el perineo y la parte anal pero por fuera, nada de por dentro) y dicen que vamos,… ¡¡¡PEDAZO ORGASMO QUE OS DA!!! Eso si,… por suerte hay una crema específica para vosotros, por lo de si compartir crema no lo lleváis bien, jajajajaja.

 

Y seguro que me dejo un montón de cosas por contarte pero es que flipé en colores sobre lo poco que sabía del asunto y eso que yo era de las entendidas en el Tuppersex, jajajajaja.

 

En fin grandullón, que me hubiera gustado grabártelo todo con una cámara web para luego enviártelo no por lo sexual de la reunión sino por lo divertido de la misma.

 

Bueno, un gran abrazo y feliz año nuevo.

 

Tu loca amiga,

 

CRAZY

 

jueves, 31 de enero de 2013

NOTICIAS REALES DE UN PAÍS = FICCIONES NADA FICTICIAS



 

Algunos titulares dignos de admirar (noticias que habría que leer o recordar):

 

CRISIS ISLANDIA:

 


 

 


 


 

 

 

CRISIS ESPAÑOLA:

 

 

 


 

(Dentro de la misma noticia:

 

Políticos salpicados por el escándalo

 

Pablo Crespo, ex secretario de Organización del PP en Galicia.

Luis Bárcenas, ex tesorero nacional del PP y senador por Cantabria.)

 


 

 

  • 25 de octubre de 2012: Anticorrupción destapa la supuesta financiación ilegal del PP de Baleares (La trama afecta a tres exconsejeros del Gobierno que presidió Jaume Matas. Las consejerías adjudicaron a dedo contratos a una firma de publicidad. La empresa desviaba parte del dinero público a financiar la campaña electoral) Enlace web: http://politica.elpais.com/politica/2012/10/24/actualidad/1351097569_740842.html

 

  • 31 de enero de 2013: Las cuentas secretas de Bárcenas (LA CONTABILIDAD MANUSCRITA DE LOS TESOREROS DEL PP ENTRE 1990 Y 2008. En los extractos figuran donaciones de constructores, entre ellos tres imputados en Gürtel. Cospedal, Rato, Mayor Oreja, Arenas, Acebes y Álvarez Cascos niegan haber recibido los pagos. Las anotaciones reflejan entregas a Rajoy de 25.200 euros anuales durante 11 años). Enlace web: http://politica.elpais.com/politica/2013/01/30/actualidad/1359583204_085918.html

 

 

JUSTICIA POLÍTICA:

 

 


(Dentro de la noticia:[…] Además, el Gobierno modifica el Código Penal para poder castigar a los cargos públicos que "oculten, manipulen o falseen las cuentas públicas". Para ello se tipifica este comportamiento como delito penal y se fija una inhabilitación especial para empleo o cargo público por un plazo de hasta diez años).

 

 

¿Qué podemos hacer cuando algo así nos deja sin palabras? Son pocos los que están en la cárcel y han sido imputados por cargos penados. Son pocos los que han sido inhabilitados. ¿Es España un país de la Unión Europea? ¿O es un chiste del que sólo hace gracia a los que no sufren las consecuencias y que se encuentran fuera de nuestras fronteras? ¿A quién hay que perseguir? ¿Al ladrón que roba para comer? ¿O al que roba y queda impune de los cargos por tener un cargo político? ¿Existe la justicia poética? ¿O en España no existe ni siquiera la justicia a no ser que seas pobre? ¿Contra quien tiene que luchar el que no tiene ni espada? ¿Quién podrá ORDEN en un país donde el ladrón es el que gobierna?

 

¡¡¡PASEN Y VEAN!!! Esto es España. Da igual si va bien o no. Seis millones de parados y los bolsillos de los ricos llenos de dinero negro. ¿España va bien? ¡España YA NO VA! Hay que limpiar la porquería de una vez y cimentar el futuro sobre verdaderos trabajadores. ¿Dónde están los que lucharan por nuestro futuro? Sin futuro en una colas sin fin que no para de crecer.

 

MORALEJA: Una frase de Indira Gandhi como punto y final: "Hay que vigilar a los ministros que no pueden hacer nada sin dinero y a aquellos que quieren hacerlo todo sólo con dinero."

miércoles, 30 de enero de 2013

¡OLVÍDATE DE LAS SORPRESAS!

 

Hoy el sentirse triste forma parte de una tristeza mayor. Es como si un niño hubiera descubierto una gran mentira y se sintiera completamente engañado por todos y por todo.

 

La crisis me ha mostrado cosas que hasta ahora no conocía: unas extrañas, otras predecibles, algunas completamente desastrosas y otras francamente detestables. Pero jamás me hubiera imaginado que entre ellas descubriría que las SORPRESAS no existen (y eso que las sorpresas mas bonitas que se pueden hacer, no cuestan dinero). A mi, por ejemplo, me encantaría que una noche despejada de luna nueva, alguien me “secuestrara” para ir a lo alto de una montaña en una parte oscura con una manta para tirarla en el suelo y poder contemplar durante horas las estrellas y con la esperanza de ver alguna fugaz. O por ejemplo, que alguien viniera y me dijera,… ¡Vamos! Y coger el coche sin saber ni dónde ni por hacer algo (sólo con un porque si en el corazón y con la ilusión de no saber nada para que todo parezca renovado, nuevo,… sorprendente). O simplemente, decirme: ¿Sabes quien tiene las llaves de la azotea de aquel edificio tan alto? Pues yo y puedes coger tu cámara para hacer fotos de un paisaje precioso de la ciudad. Y así hasta el infinito sin coste económico pero si coste de horarios y claro, no todo el mundo quiere sacrificar horas de su vida para sorprender a alguien y menos si ese alguien sólo es un conocido, una amiga, o alguien que un día fue especial y ahora,… sólo hace tiempo que no la ves. O peor aún, cuando llevas años y años y años con tus amigos (masculinos claro esta) y jamás se acuerdan de enviarte ni una postal por tu santo. No quieres nada grande, ni pequeño, ni mediano. Una felicitación que siempre llega una semana tarde si es que al final llega).

 

La otra cara de la moneda, la de dar tu la sorpresa, es también oscura y negra. Viste algo que alguien quería o dijo que le gustaría tener o recibir. Un ejemplo: un gran amigo tuyo dijo que lo que más le gustaba para desayunar era el pan de mollete de su pueblo con leche condensada. Consigues encontrar a alguien que te lo trae de allí y recién hecho el día anterior (un pan tan bueno no se pone malo en unas pocas horas de más), vas al supermercado a comprar leche condesada y te presentas al día siguiente con una bandeja con ese desayuno. Primero te mira sorprendido y luego diciendo,… ¿Y eso para quien es? Te siente estúpida y algo que pensabas que le iba ha hacer una ilusión tremenda, acaba criando polvo en una mesa olvidada del despacho. O peor aún, una compañera de trabajo que está pasando una mala racha, te habla de lo bonito que había sido su ramo de flores y lo complicado de componerlo porque era de orquídeas naranjas que las trajeron de no se donde. Recorres un montón de floristerías tres meses antes de su cumpleaños intentando que alguien consiga traerte esa flor tan deseada. Cuando llega ese día, le entregas un precioso regalo y ella lo mira y lo deja a un lado sin observarlo un instante. ¿Qué ha pasado? Te preguntas más que pasmada como estupefacta y resulta que ni se ha dado cuenta de que era una orquídea naranja. Al final se marcha con ella pero sin ni un ápice de sorpresa ni siquiera en su mirada y tu te preguntas,… ¿Se la lleva porque le ha hecho de verdad ilusión o sólo para no tirarla delante de mis narices? O cuando buscas un libro especial para tu persona especial y te pasas meses y meses buscando y cuando por fin lo consigues, se lo entrega y te dice sin abrirlo: ¡Es un libro! Si un culminación de asombro en su voz. Te dan ganas de arrancar el libro empaquetado de sus manos y de decir,… cualquier cosa. Al final, tanta falta de sorpresa en ese tan simple, te hace enmudecer, te deja completamente de piedra).

 

Y a veces, sólo a veces, te paseas por la red para sorprender a alguien y imaginártelo con una sonrisa de oreja a oreja por una chorrada que has encontrado en Internet para hacerle reír un instante y que deje de pensar en todo lo malo que le rodea o le puede rodear en ese momento de su vida (el agobio, el estrés, la ira, el mal rollo en el trabajo,…). Si esa persona no contesta un LOCA, o un BOBA, o un ESTÁS PARA QUE TE ENCIERREN con una carita sonriente de emoticono, es que simplemente, ni se sorprendió y encima pensó: Y esta,… ¿De que coño va la majara?

 

En fin señores, que cuesta muy poco sorprender a alguien, imaginarte su sonrisa sin verla y desearle que tenga un buen día, que sea feliz, que la vida es un ratito y has que disfrutarla de principio a fin. Pero si esa persona se llama YO y hoy le quitaron una venda preciosa de sus ojos, no solo se sintió caer en las fauces de la verdad sino que tristemente,… dejó de creer en sus hadas para siempre.

 

MORALEJA: John Lennon dijo: “La vida es aquello que te va sucediendo mientras te empeñas en hacer otros planes”. ¿Cuántos planes más vas a hacer para no dejarte seducir por algo que VERDADERAMENTE TE SORPRENDA? ¡Tu mismo! Tu vida es tuya pero piensa que son cuatro días y ya has perdido uno y medio con tanto planear ser feliz en vez de disfrutar de serlo.

 

martes, 29 de enero de 2013

NUEVA ESCUELA Y NUEVOS ALUMNOS (relato)

 

Había sido un año duro profesionalmente hablando. Me habían trasladado en septiembre para impartir clase a un grupo de grado formativo superior de la que sería la tutora pero cuando llegué a esta escuela, el grupo estaba todo formado por hombres y todos unos años mayores que yo.

 

Durante el largo año y alumno en concreto que tenia 45 años, diez más que yo, había sido el más rebelde sobretodo cuando cuestionaba mi autoridad en clase al ser mas joven que él. Tenía un porte elegante, pelo castaño claro, con ojos color miel pero que no se porque,… no aceptaba mi posición de superioridad al ser la profesora de la clase.

 

Llegó el final de curso y todos juntos nos fuimos a celebrar que todos habían aprobado. Yo me puse elegante pero sin nada muy extremado: ropa interior negra, camisa roja semitransparente ajustada un poco al cuerpo, pantalón negro tejano ceñido y para evitar la transparencia de la blusa, un chaleco que dibujaba muy bien las curvas de mi pecho y mi cintura. El pelo suelto al aire ya que siempre me habían visto con algún recogido y por una noche,… quería que me vieran como una compañera más en vez de como la profesora.

 

Me fui al restaurante que habíamos reservado para celebrar la cena y el posterior baile en una pequeña discoteca del mismo recinto en taxi porque tenía el coche en el taller.

 

La cena fue muy agradable y pese a que Ángel, que así se llamaba mi alumno rebelde, se había puesto lo más alejado de mí, no había soltado ninguna impertinencia. Pasaron el primer plato, el segundo, el postre que llegó con cava y el café sin ningún mal rollo en el ambiente. Pero Ángel que apenas había dicho nada, lo había pillado clavándome la mirada como si quisiera traspasarme con ella y hacerme desaparecer. No le di importancia. Yo iba a pasármelo bien y me daba igual aquel alumno rebelde sin sentido.

 

Bajamos a la discoteca del restaurante y estábamos sólo nosotros. Empezamos a bailar las chicas y los chicos se fueron animando poco a poco. Comenzaron a entrar otros grupos de personas con los que habíamos coincidido en el comedor y que también celebraban el fin de curso o algo parecido. Nos juntamos un buen grupo de gente que empezamos a bailar de todo. Varias veces que había mirado al frente me había topado con la mirada de Ángel que se había aposentado en un rincón de una de las barras y que tenía buena visibilidad de dónde se había colocado nuestro grupo. Para mis adentros pensé,… ¡Es que no puede darme un respiro ni él último día! Pero no quería amargarme y seguía bailando, pasándomelo bien con quien quería divertirse y dejarse llevar.

 

Llegaron las tres de la mañana y con la excusa de que iba al baño, salí de la discoteca para llamar un taxi y volver a casa. Cuando eché mano de mi bolso me había quedado sin batería en el móvil y la parte de arriba del restaurante donde había teléfono público para llamar, estaba cerrada ya. Sentí la puerta y deseé que fuera alguno de mis alumnos para que me dejara llamar desde su móvil a un taxi. Pero era Ángel y no le quise decir nada.

 

        ¿No te ibas? – me dijo secamente.

        Me he quedado sin batería y no puedo llamar a un taxi – respondí en un tono igual de seco.

        Ya te llevo yo mujer – respondió.

        No hace falta,… esperaré a que salga otro compañero para que me ayude.

        Te llevo yo. No te voy a dejar aquí sola. Además ahí dentro ya han empezado a darle a alcohol de lo lindo y no creo ni que se acuerden de donde tienen la mano derecha cuando salgan.

        Me harías un favor si me llevaras – le dije lo mas cordialmente que pude.

 

Su coche era precioso SEAT León negro de los antiguos. Me abrió la puerta para mi sorpresa y luego se fue él hacia el asiento del conductor. Encendió el coche y empezó a sonar la radio con canciones pop de los ochenta. Eran muy dulces y tiernas. Por un momento con todo aquello me había dejado descolocada.

 

Puso el aire caliente porque yo no dejaba de frotarme las manos que se me habían quedado un poco frías con la brisa de la noche. Me las cogió y me las arrimó a la salida de aire con cariño.

 

¿Quién era ese hombre? ¿Estaba bebido? ¿Había sido una máscara lo que había llevado todo el curso conmigo?

 

        ¿Puedes conducir? – pregunté un poco asustada.

        No estoy bebido,… no te preocupes.

 

No hubo apenas palabras sino que dejamos que la música fuera lo que compartíamos en aquel espacio reducido. Cuando llegábamos a algún semáforo rojo yo miraba por la ventana y sentía sus ojos repasarme de arriba abajo. Me sentía desnuda en cada parada aunque fuera por unos instantes. Pero a la vez deseaba que llegara el momento de una parada para sentir como su mirada acariciaba cada milímetro de mi piel.

 

Llegó a la puerta de mi casa y yo no recordaba haberle dado la dirección en ningún momento:

 

        ¿Cómo sabes dónde vivo? – pregunte entre sorprendida y asustada.

        Si te lo digo no te lo vas a creer.

        Inténtalo. – dije no ponerme nerviosa.

        Déjalo. ¡Buenas noches! – respondió con voz misteriosa.

 

Iba a bajarse del coche para abrirme la puerta y le abrí mi puerta antes de que él pudiera bajarse del coche. Me cogió por mi sorpresa y sujetó mi cara con dulzura. ¡Me besó! Me aparté perpleja unos pocos centímetros para mirarle a los ojos. Le besé y dejamos que nuestros cuerpos hablaran en su coche. Nos deslizamos hacía la parte de atrás. Me besaba mientras yo me había puesto a horcajadas encima de su cuerpo. Le intentaba quitar la americana negra que llevaba encima de una camisa lila. Se la quitó él y empezó a quitarme el chaleco, a desabrochar mi blusa, a desabrochar su blusa. Empecé a deslizar mi boca, mi lengua por su cuello escuchando cada gemido que hacía incrementar el ardor de mi sexo. Bajé hacia sus pezones y comencé a lamerlos y cuando estaban erectos con mis caricias, empecé a mordisquearlos de deseo. Le hacía un poco de daño sin querer pero sentía que eso le gustaba así que lo seguí haciendo. Desabrochamos nuestros pantalones, nos despojamos de la ropa interior y nuestros ardientes sexos se encontraron por fin. Podía sentir toda su fuerza dentro de mí como entraba y salía. Cada embestida me excitaba más porque notaba cada centímetro de su descomunal sexo el daba un movimiento diestro para volver a adentrarse en mi con más fuerza, con mas pasión, con un deseo infinito contenido durante un largo año. No podía ni pronunciar palabra ni él ni yo pero nuestros gemidos nos incrementaban la excitación más y más hasta que llegó un orgasmo muy deseado. Fue rápido pero intenso. Nos recompusimos un poco y quise dedicarle caricias tiernas a su sexo. Empecé a besar su vientre y su sexo respondió rápido con una nueva erección. Empecé a lamerlo desde la punta hasta los huevos con cariño, con placer y mucho deseo. Le gustaba mucho como mi legua jugaba con su miembro y cuando me lo metí en la boca,… dio un grito estremecedor de placer. Lo lamí mientras pellizcaba sus pezones y no dejaba de mirar su cara de placer,… ¡¡¡ME EXCITABA MUCHO AQUELLA SITUACIÓN!!! Empecé a mojarme mucho. Sentí su leche en toda mi boca caliente. La dejé que bajara por mi garganta para sentirla muy adentro de mí.

 

        Ahora me toca a mí probar tu esencia. – me respondió de forma sugerente.

        Preferiría que me penetrarás por detrás si aún tienes aguante.

 

No se si fue por las palabras que sonaron entre reto y deseo que me dio la vuelta en su coche y se adentró entre mis nalgas de forma magistral haciéndome gemir con cada movimiento pélvico, con cada roce de sus huevos en mi clítoris muy erecto que se volvía loco con cada embestida. Me derramé y sentí como su esencia volvía a adentrarse en mi cuerpo.

 

No eran miradas de ganas de matarme eran miradas de ganas de poseerme las que me había dedicada aquella noche y ahora que era una realidad, hasta yo me sentía bien estremeciéndome de placer entre sus brazos en la parte trasera de su coche.

HISTORIAS DE UN INGRESO HOSPITALARIO

 

Cuando uno entra en Urgencias de un Hospital no es por gusto. Normalmente un familiar, un allegado, un amigo, alguien lo suficientemente importante para nosotros, está pasando un momento malo y lo peor de todo es que no sabemos porque le viene. Los médicos empiezan a mirar, empiezan a valorar unas posibilidades u otras hasta que por desgracia pero por su bien,… lo ingresan.

 

Todos sabemos lo mal que se pasa hasta que el diagnóstico llega y por fin, cuando todo queda en un tratamiento de un par de meses o tres,… nos sentimos hasta aliviados.

 

Cuando el tiempo pasa, la medicación ha hecho efecto o ya se ha dejado, es cuando podemos pensar en todo lo que hemos pasado desde la entrada en urgencias hasta la salida o el alta del hospital.

 

Entramos en el hospital a eso de las 18h. Vemos las camillas, las sillas de ruedas y pensamos,… ¡Cuando me va a tocar a mí! De golpe y porrazo, una mujer que apenas lleva una hora, que dice que se ha caído en mitad de la calle y que tiene una brecha sin sutura, se levanta de la silla de ruedas y dice que está harta de esperar (tal y como está la sanidad y la reducción de personal, yo me pregunto si esa señora de verdad se ha caído en la calle o se ha tirado porque no es normal que sólo lleves una hora, ya estés dentro, que es también toda una aventura viendo la cantidad de personas que van a urgencias como si fueran a pasar la tarde cosa no tan agradable para los que verdaderamente la visitamos de pascuas a ramos y siempre porque es la única alternativa que perece vislumbrar en nuestro horizonte). Las enfermeras, ATS y demás, intentan que tome asiento en la silla de ruedas con una voluntad dulce pero firme. La señora se sienta y se duerme (cuando recibe un golpe en la cabeza dicen que eso no es bueno). Una enfermera que la ve pasa y llama al médico que la despierta con el consecuente enfado de la señora. “¡Que la lleven a rayo!” dice el médico un tanto preocupado (uno piensa para sus adentros,… ¿No habrá un cuarto acolchado en psiquiatría para ella? Yo creo que estaría mucho mejor allí. Lo piensas pero te callas. En ese momento de lucidez que te da el dolor has sido malo hasta con el pensamiento. ¡Quizás yo tampoco debería estar aquí! Acabo pensando cuando el dolor se intensifica y estoy a punto de gritar).

 

Pasamos a un box y al lado una mujer mayor (otra diferente a la anterior) muy nerviosa con problemas respiratorios. El médico le dice que le den un diurético y la mujer se enfada porque tendrá que levantarse toda la noche a orinar. “¡No señora! Tiene que llamar al timbre porque está reteniendo mucho líquido y tenemos que controla lo que elimina” le responde el especialista. La señora que no le parece una buena idea, acaba cediendo y los hijos (todos varones) no quieren pasar la noche en un sofá muy duro del box. Acaban dejándola sola y la mujer, ya no sé si para joder o porque es mas corta que las mangas de un chaleco, se dedica a pasarse toda la noche gritando a grito pelao SEÑORAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA, en plan Gracita Morales pero sin puñetera gracia, para llamar a las enfermeras que pasan por la puerta. Al señora molesto se une,… ¡¡¡QUE ME MEOOOOOOOOOOOOOO!!! Convirtiendo uno de los box de urgencias más en un mercadillo que en un lugar de reposo y descanso como rezan en la mayoría de carteles que rodean todos los rincones visibles de este lugar sanitario. Al final una enfermera se presenta y le explica que no se puede gritar y que tiene que presionar el botón. Le traen la cuña, hace dos gotas de pipi y la dejan allí otra vez esperando que se duerma (si no se duerme le atizo con mi cuña, pienso yo de nuevo en un ataque de despertar molesto tras el medicamento suministrado a mi persona). Cuando parece que la calma reina y que será posible dormirse media hora larga, los gritos del SEÑORA vuelve a invadir el box pero ahora la mujer no se mea,… ¡SE CAGAAAAAAAAAAAAAAAAAA! (no se si me molesto por la forma de decirlo o por la forma de seguir llamando a las enfermeras a grito pelao pese a que ya le han explicado el mecanismo del dichoso botoncito. Señora (me da por pensar) o aprieta el botón la próxima vez o me voy a dedicar a clavarle todas esas agujas de sacar sangre en plan acupuntura por todo el cuerpo,… ¡Y yo no sé de acupuntura!

 

Por fin hay una cama libre y subimos a planta. Allí, otra mujer mayor, está con problemas respiratorios también. Es una señora inquieta y muy nerviosa de unos noventa y tanto años. Empiezo a suponer que podré descansar un poco pero no es así. La mujer se quita la medicación porque dice que hace mucho ruido pese a que la mascarilla la tiene en la cara y no en el oído. Luego, cuando le traen la comida, si quiere quitar la “nubolización” y las enfermeras le dicen que hasta que no acabe, no puede comer (con una paciencia y una dulzura que cuesta creer que estén sufriendo recortes en su trabajo. Me da por pensar,… ¡Esto es profesionalidad y lo demás son tonterías!). Cuando se acaba el tratamiento, la mujer ya no quier comer (¡Para eso tanto molestar a las enfermeras! Yo la cogía y le hacía tragar hasta el plato de plástico pero tomo aire e intento dormir). La hija se va, nos desea buenas noches. Mientras nosotros esperamos un poco más, la señora de noventa y tanto años, dice que está harta de estar allí. La cortina está corrida porque están aseando al paciente de al lado cuando, por un casual, oímos ruidos de la barandilla metálica. ¡¡¡DIOS!!! ¡PERO QUE HACE SEÑORA! Corre un familiar mío a rescatar a la señora que no se podía mover y que ya tenía medio cuerpo fuera de la barandilla apunto de estrellarse contra el suelo. Avisamos corriendo a las enfermeras (esto sí es una urgencia y no el comer o no comer de antes). Las chicas le dicen que se tiene que quedar ahí y llaman a la hija que aún no había salido del recinto sanitario pues estaba hablando con un ATS conocido. La mujer vuelve y le dice a las enfermeras que su madre toma una medicación para los nervios que SE HA OLVIDADO COMENTARLE AL DOCTOR. ¿Qué hacen las enfermeras? Pues tener que aguantar a aquel manojo de nervios toda la noche pues ellas no pueden suministrar un fármaco sin que lo haya recetado un médico. Pues toda la noche la abuela FUGITIVA venga a intentar salirse de la cama y las enfermeras cada dos por tres, barrándole el paso en muchos casos in extremis para que no acabara estrellándose contra el suelo. Por fin pasa un médico y le da algo que la consigue dormir. ¿Y esto es para que yo mejore o para que acabe tirándome desesperada por la ventana de un piso cero?

 

En fin, que todo aquel que piense que el que está en urgencias es por gusto ya le digo yo que no. Pero si encima le da por pensar que el que acaba ingresado lo hace por cobrar de la seguridad social y pasar unos días de vacaciones ya les digo yo que para nada, mi concepto de las vacaciones, incluye señoras mayores que no saben ni lo que quiere y que se pasan toda la noche o practicando el escapismo o haciendo oposiciones para pregonera de su pueblo.

 

MORALEJA: Según nuestros amigos de Wiki el sector salud o la sanidad (del lat. sanĭtas, -ātis) es el conjunto de bienes y servicios encaminados a preservar y proteger la salud de las personas. Yo ampliaría, con su permiso, la definición diciendo lo siguiente: Eso siempre el vecino de cortina, box o cuarto lo permite sino acabas jodido, mucho mas jodido de lo que entraste. La sanidad no es para todos pero no por falta de recursos materiales, que también, sino por la falta de recursos de conciencia humana. Pero en fin, como a las personas mayores se les tiene que perdonar todo, dejemos esta definición como algo entre tú y yo. ¡Mejor así! Todos tenemos que llegar a viejos. ¡Ojala lo hagamos con la cabeza sana!