martes, 1 de septiembre de 2015

EL FINAL DE FREDDY KRUEGER





Quien conoce un poco el Cine de Terror, si hubiera un Rey del Miedo, ese sería, sin lugar a duda, Freddy Krueger.

En su larga saga de películas (nueve en total si contamos el remake de Pesadilla en Elm Street) nada ha podido acabar con su “vida”, ni siquiera el olvido que fue el antecesor de la controvertida octava película que llevaba por título Freddy contra Jason en la que el Rey de reyes del Pánico, utilizaba al pobre Jason para que los niños de Elm Street volvieran a creer en él para volver.

Sin embargo, lejos de creer en que cualquier arma sobrenatural podría acabar con su vida en una próxima entrega, ha sido su propio padre, con su muerte, quizás anticipada pues sólo tenía setenta y seis años de edad, el que ha puesto fin a la vida de Freddy Krueger.

Wes Craven murió el pasado 30 de agosto a causa de un tumor cerebral.

Con veintitrés films a sus espaldas como director, otras tantas como productor, algunas como montador, incluso como actor ocasional en otras cuantas, nos abandona el que sin duda fue el maestro indiscutible del Cine de Terror.

Pocos sabrán que los inicios de Craven fueron de lo más duros para alguien que luego demostró tanto talento como valía. Y es que, sus escenas demasiado explícitas para  la época, le consiguieron el título de director de lo espeluznante.

Sus inicios como director de cine comenzaron en los años setenta. Bajo el seudónimo de Abe Snake y con escasos recursos económicos, rodó su primera película, una pornográfica, en la que también hizo de actor.

En los años ochenta escribió el guión de Nightmare on Elm Street. Fueron muchas las puertas a las que Craven tuvo que llamar con aquella idea que los demás entendidos en la materia de la época, rechazaban, literalmente, por ser poco creíble y demasiado surrealista. Pero alguien confió en su proyecto y en 1984, de la mano de New LineCinema, el primer gran éxito de Wes conquistó la gran pantalla.

El personaje de las cuchillas en la mano al que todos recordamos aún pese a que hayan pasado los años con el nombre de Freddy Krueger, no fue sólo un éxito en taquilla sino que todos deseaban más del Rey indiscutible de los Villanos ya fuera en una figura, en un camiseta, en una revista,… El merchandising que acompañó al guión rechazado por más de una productora, resultó para New Line la gallina de los huevos de oro y proporciono unas ganancias jamás imaginadas.

En 1996 otra de sus ideas aterradoras vio la luz de la mano de Ghostface con la película Scream. Otro éxito que no se quedó en la trilogía sino que tuvo cuatro entregas que hicieron las delicias de nuevo de los amante del terror.

Sin embargo, con la muerte de Wes Craven, dos de aquellos que durante años nos pusieron los pelos de punta y nos acecharon tanto en sueño como en la vida real ya fuera con un cuchillo enorme o con una mano llena de cuchillas afiladas que podía cortar hasta el aire, se han ido para siempre con su progenitor

Hasta los “monstruos” lloran, y las lágrimas de Freddy y Ghostface nos han enternecido a más de uno. ¡Descansad en paz! Ya no habrá nunca jamás nadie como vosotros para robarnos nuestros sueños.

MORALEJA: François Mauriac, (1905-1970) escritor francés, dijo: “La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente”.

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